Miel de Monte

Se producen en colmenares situados entre los 450 y 1200 metros de altitud y desde mediados de primavera hasta finales del verano según la zona de la isla. Comprenden floraciones de escobón, brezo, tajinastes, tomillo, orégano, hinojo, castaño, eucalipto, etc. Predominan los colores oscuros, con aromas de media a elevada intensidad y con gran riqueza de matices.

Han sido siempre muy afamadas en la Isla. Se producen en altitudes superiores a los 1.200 metros, lo que se corresponde casi en su totalidad con el Parque Nacional de Las Cañadas del Teide y sus áreas limítrofes.

La mayoría están basadas en floraciones endémicas de esta zona de Tenerife, como la Retama del Teide, la Malpica, el Rosalillo de Cumbre, el Tajinaste rojo, el Tajinaste picante, etc.

Además de mieles multiflorales producidas por combinaciones de estas especies, destaca la miel de Retama del Teide y otras que, aunque menos abundantes, presentan un gran interés, como las procedentes de las floraciones de Chajora o Malpica, que son de color claro y cristalizan rápidamente, adquiriendo una consistencia cremosa y una tonalidad nacarada suave.

Color

Normalmente ámbar, pero puede ir desde muy claro hasta ámbar oscuro.

Olor y Aroma

Diverso y con matices más o menos intensos según su origen

Estado Físico

Muy variable, con tendencia predominante a la cristalización.

Zona de Producción

Tradicionalmente se han diferenciado según su zona de producción en costa, monte y cumbre, o bien por la época del año en que se producen. Aquellas mieles multiflorales en las que algún tipo de planta impone una nota dominante, sin considerarse monofloral, se suelen denominar miel multifloral.